María
Elena Mendoza
BLUE LABEL / ETIQUETA
AZUL es el título de la novela ganadora
del Primer Premio Iberoamericano Arturo Uslar Pietri, celebrado el pasado 14 de
mayo, seleccionada entre 106 novelas, de 14 países participantes. Eduardo
Sánchez Rugeles, su autor, es un docente venezolano, Licenciado en Letras de la
Universidad Católica Andrés Bello y Licenciado en Filosofía de la Universidad
Central de Venezuela, con estudios de Maestría en Historia de la América,
Maestría en Estudios Latinoamericanos de la Universidad Autónoma de Madrid y
Maestría en la Universidad Complutense de la misma ciudad ibérica. Sánchez
Rugeles engaña con un físico juvenil y hasta ingenuo. Esa cara de muchacho
genio, cara de “fajao”, para utilizar algunas palabras típicas de sus
personajes, esconde a un grato caraqueño, que apostó a las historias de sus
alumnas como epicentro de la novela ganadora.
No nos estamos entendiendo. El Siglo
XXI demanda una actualización mental del software histórico que nos ata a los
héroes de la patria, la espada de Bolívar y la Carta de Jamaica. Si queremos
conectarnos con la juventud venezolana, arrancar de una vez y para siempre las
referencias tradicionales que no hacen “click” en los anhelos, expectativas,
deseos de nuestros muchachos, BLUE LABEL / ETIQUETA AZUL puede ser el primer
paso para reflexionar y olvidarnos de hacer las cosas como nos las enseñaron y
comenzar a moldearlas como demanda la actual y difícil circunstancia
venezolana.
¿Cómo llega BLUE LABEL al Jurado de este primer premio a la mejor novela
Iberoamericana?
Advirtiendo mi
asombro ante su evidente juventud, Eduardo Sánchez Rugeles cuenta que tiene 32
años y que es casado. Muestra nerviosamente la emoción que siente por el
reconocimiento a su obra pero no sin aclarar que ésta, es su segunda “hija”.
“Cuando supe del
concurso, estaba claro en que enviaría mi primera novela, TRANSILVANIA
UNPLUGGED. Una obra a la que le dediqué mucha investigación y hasta estudios de
rumano. Con ella participé en varios eventos literarios sin éxito.
“Cuando me traslado a
España, dejo atrás la docencia en bachillerato. Docencia que muchos amigos
jamás entendieron y lo calificaban de “pérdida de tiempo y talento”. Inicio mis estudios superiores y siempre
escribiendo sin sentirme satisfecho con algunos de mis textos. Mantenía mis esperanzas en mi primera novela.
“Al pasar el tiempo
comienzo a sentir una nostalgia, tristeza y melancolía por esa docencia que
tanto me enseñó y de la que tanto me nutrí. Esa experiencia añorada y la propia
de mis años de secundaria en diferentes colegios, años alocados y dispersos, me
motiva a escribir mis primeros párrafos de BLUE LABEL / ETIQUETA AZUL.
“El recuerdo de mi
relación con esta adolescencia inconforme, frustrada, obstinada de una
situación familiar disfuncional y otra de país en situaciones confusas,
inseguras, desorientadas, si se quiere, da origen a Eugenia Blanc. Una
adolescente caraqueña de clase media que desea irse definitivamente del país,
harta de la vida sosa de la ciudad.”
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¿Qué pasa
entonces con TRANSILVANIA UNPLUGGED?
“Participo en el
concurso con ambas novelas. TRANSILVANIA UNPLUGGED queda en tercer lugar. La
aflicción es la que impulsa a BLUE LABEL / ETIQUETA AZUL, y de esos escasos
párrafos que apenas hace un año era todo lo que tenía en papel, se desarrolla
rápidamente una pieza juvenil que terminó siendo el resultado de una novela
verdaderamente contemporánea del Siglo XXI. Ahora se me han abierto muchas
puertas, tengo muchos proyectos que retomar y seguiré escribiendo desde España
donde vivo desde hace unos años.”
Lo que pensaban sus
compañeros que había sido una pérdida de tiempo, es la vivencia íntima e
intestina de un profesor y sus remembranzas de conexión con la adolescencia
caraqueña, que se transforma en la novela ganadora del primer Premio
Iberoamericano de Literatura Arturo Uslar Pietri, género Novela.
En un contexto
trágico que vive el país, Eduardo Sánchez Rugeles confiesa que hablar de
Venezuela es un reto complicado:
“Venezuela es hoy una
hipótesis no resuelta, vivimos en un conformismo mediocre. Decimos que el
venezolano es alegre, pero no es cierto. Vivimos rodeados de tristeza. Los
intereses de la Venezuela de hoy no están en los textos de la historia del
siglo XIX, a éste debemos ubicarlo en un documento. La historia es sólo eso,
historia, un referente, una nota al margen. Debemos mirar hacia adelante a
partir del siglo XXI porque las espadas prostituidas de los héroes no pueden ser
más valiosas que la esperanza de un futuro digno. Yo no creo en revoluciones,
creo en el poder de las palabras; pero debemos estar conscientes de que aún
cuando tengamos iPods y Blackberrys seguimos siendo una sociedad feudal.”
Como bien lo expresó
Antonio Ecarri, iniciador de la Fundación Casa Arturo Uslar Pietri, durante su
presentación, “esta novela marcará un hito en la literatura venezolana ya que
es un testimonio sobre una etapa histórica en una Venezuela que lamenta que el
objetivo común de los jóvenes –muy a pesar de ellos mismos- sea buscar otros
destinos distintos a su patria”.
BLUE LABEL / ETIQUETA
AZUL es una novela que, como DOÑA BARBARA que en su momento marcaba la
Venezuela de una época, dejará una huella imborrable en una generación que –parafraseando
a Arturo Uslar Pietri- le toca la difícil tarea de dedicarse, con toda fuerza,
a la empresa de hacer un país.
En medio del
protocolo formal de la entrega del premio a Eduardo Sánchez Rugeles, el
silencio propio de tan serio acto, fue alegremente interrumpido por emotivos y
sentidos vivas, aplausos y gritos de “ese profe!”, de la promoción 80 de
Humanidades, del Colegio San Ignacio.
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